El agua de Madrid es conocida por su color, calidad y sabor. Según un estudio elaborado por Canal de Isabel II, el agua del grifo en Madrid es blanda, de mineralización débil y baja en sodio. Sin embargo, es importante saber qué se le añade al agua de Madrid y cómo se trata para hacerla potable.
¿Qué se le añade al agua de Madrid?
Lo normal es que el agua que bebemos en las ciudades haya sido utilizada ya varias veces. Además del agua, se permiten la presencia de 13 sustancias diferentes en el agua de uso doméstico, como conservantes, antioxidantes, colorantes, suavizantes, estabilizantes, saborizantes, entre otros. Estas sustancias están reguladas por la legislación vigente y se controla su presencia en el agua para garantizar la salud de los consumidores.
Es importante mencionar que el agua contaminada puede causar más muertes que cualquier guerra, por lo que es fundamental tener un suministro de agua potable de calidad. Los gobiernos se encargan de proteger a sus ciudadanos a través de tratamientos y regulaciones para garantizar la seguridad del agua que consumimos.
Tratamiento del agua en Madrid
El agua que proviene de los ríos y se utiliza para abastecer a las grandes ciudades, como Madrid, pasa por diferentes etapas de tratamiento para hacerla potable. Estas etapas incluyen la aireación, la decantación, la filtración y la desinfección.
En la etapa de aireación, se utiliza cloro u ozono para eliminar la materia orgánica y los metales presentes en el agua. Luego, se añaden productos que contienen aluminio para formar flóculos y facilitar su eliminación durante la decantación. A continuación, el agua pasa por un lecho de arena para eliminar las partículas que hayan escapado de la decantación. Finalmente, se desinfecta el agua utilizando principalmente cloro.
Es importante destacar que el cloro utilizado en el tratamiento del agua es considerado una sustancia que ha salvado muchas vidas debido a su capacidad desinfectante. En Madrid, se utiliza cloramina para desinfectar el agua, ya que es más estable y evita la necesidad de reclorar.
¿Es mejor cocinar con agua mineral?
La elección de cocinar con agua mineral o agua del grifo depende de varios factores, como el sabor del agua y la presencia de minerales. En el caso de Madrid, el agua del grifo es de excelente calidad y sabor, por lo que muchos consideran que es ideal para cocinar. De hecho, se dice que el secreto del cocido madrileño está en el agua del grifo de Madrid.
En general, se considera que las aguas blandas son más adecuadas para cocinar, ya que dejan menos residuos secos y tienen mejor sabor. Sin embargo, no todas las regiones tienen aguas blandas, por lo que puede haber diferencias en el sabor de los platos. En estos casos, puede tener sentido cocinar con agua mineral para evitar que afecte al sabor de los alimentos.
Tener en cuenta el impacto ecológico de la comercialización de agua mineral y considerar que el agua del grifo es igualmente potable y saludable.
El agua de mar para cocinar marisco
En los pueblos costeros, el agua de mar se ha utilizado desde siempre para cocinar marisco. Para cocinar el marisco correctamente, tener en cuenta la cantidad de sal. Se recomienda usar 35 gramos de sal por litro de agua para igualar el sabor del agua de mar. Utilizar agua de mar tratada y filtrada puede ser una opción para dar el punto perfecto de sal al marisco.
El agua de Madrid es de excelente calidad y sabor, lo que la hace ideal para cocinar. Sin embargo, en casos de aguas duras o cuando se busca un sabor específico, el uso de agua mineral o agua de mar puede ser una opción. Lo más importante es asegurarse de utilizar agua potable y de calidad en la cocina.
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